sábado, 28 de enero de 2012

Lana del Rey - Born to Die



Hype, hype, hype, el disco de Lana del Rey ya llegó. Sea para glorificarla y elevarle a los altares de la música contemporánea, batir records en los Top 1 haciendo que más de un moderno ponga los 40 para escucharla o para ser desterrada de las bibliotecas iTunes al grito de producto mainstream apestoso que ensucia impolutas listas gafapastas, el caso es que todo el mundo habla de la señorita Grant. Y hablan y hablaban antes de que saliera su disco. Y no faltaban motivos, ese EP incendiario que ha sido posteado y reposteado en blogs de todo el mundo, reviews en las revistas más trendy y todo ese follón al que todos estamos acostumbrados. En la entrada de la wikipedia se la define como una self-styled gangsta Nancy Sinatra con influencias de Britney Spears, Seth Putnam, Elvis Presley y Kurt Kobain. Ni más ni menos. 




Y la verdad es que sí, modernetes, tenéis razón. Lana del Rey es una niña de papá con dinerito para hacerse un disco y es un producto y todo lo que querías. Una carita nueva, ese estilo de niña buena de la America profunda que se corta sus vaqueros denim a la altura del pliegue de sus cachas. Una cara rara, no obstante, no diríamos que es rara, es que Lana del Rey es nueva, es otra cosa. No sólo un producto, más bien un producto nuevo, que innova, que funciona y que gusta.




Y nos gusta su música pese a que parece que lo tienes que decir en voz bajita, nos gusta su dulzura, su inocencia y sus letras bobas. Porque el disco de Lana del Rey es sencillo, fácil de escuchar y con unas letras de lo más simples. Tampoco su música es algo compleja, bases sencillas, punteos de guitarra y un violín que funciona a la perfección. Ya está, no hace falta irse a las últimas tendencias en producción para hacer un disco redondo. Y si bien el disco no es redondo, se puede escuchar y disfrutar, quizás demasiado largo pero siempre te mantiene pendiente con auténticos hits que se convertirán en singles que se venderán mucho. Porque una vez más, Lana del Rey es un producto. A las canciones que ya conocíamos todos (Born to Die, Blue Jeans o Video Games) se suman National Anthem, Dark Paradise, Summertime Paradise o This is What Make Us Girls que son sencillamente redondas. Y así, con todas estas canciones, con esa cantidad de dinero para mover el disco, con esos videoclips tan vintage y con esa carita de niña maltratada, tenemos los ingredientes perfectos para estar hablando de la nueva imagen de la escena para el 2012. Lanita, Lanita, que hará llorar a mariquitas un jueves por la noche que no salgan a pescar e inspirará los más melindrosos y sensibleros piropos para novias con el corazón roto.


lunes, 16 de enero de 2012

Making Mirrors - Gotye




Recabando opiniones entre mis amistades sobre el proyecto musical de Gotye (oficialmente Wouter de Backer), me encuentro con que, de lo más valorado de este señor es su videoclip para 'Somebody that I used to know'. A mí personalmente me deja frío, pero la canción me resultó desde la primera escucha un pelotazo, y profundizando sobre ella, un material muy elegante, con letra brutal y una expresividad por momentos sobrecogedora.


Además, cualquiera puede apreciar en la portada del álbum, que el tema del diseño, bastante bien (contando con la idea del videoclip, que aunque no me acabe, se ha de reconocer que es arty a más no poder). Y es que, si bien no he podido averiguar si el diseño del disco es suyo, sí que es cierto que además de música, lo suyo también es el arte, con estudios superiores y todo.

"Gotye - Sufjan
Sufjan - Gotye. Encantado"


Si bien la historia de Gotye me recuerda mucho a la de Sufjan Stevens, y comparten trayectoria vital en lo de dominar varios instrumentos, componer e interpretar su propio material y hasta tener un buen ver; en lo musical, Gotye no puede evitar recordarme todo el rato a Snow Patrol, e incluso en momentos puntuales a Beirut. Alguna canción de Making Mirrors me habría encajado perfectamente en el Eyes Open de Snow Patrol. Esto, para un servidor es bueno, aunque soy consciente del grave desacato que pueda suponer para algunos, tal afirmación.

En cualquier caso, si en otra entrada hablábamos de cantantes femeninas solistas de folk, quizá debamos plantearnos la existencia de una escena masculina de indie pop, o quizá sean las altas horas de la noche. Pero sea como fuere, este disco me gusta, es honesto, directo y asequible; al mismo tiempo que personal, esa idea de Making Mirrors y querer encontrarse, o más bien buscarse a través de las canciones de un disco como si de un espejo se tratara.




miércoles, 11 de enero de 2012

M83 - Turn yourself into a frog


Cual fue mi sorpresa al descubrir que, releyendo aburrido una de esas revistas de rock que solía comprar cuando tenía diecinueve años, ya en aquel tiempo; esa amable gentucilla redactora de la Rockzone se hacía eco del refrescante sonido de M83 en su brutal 'Saturdays=Youth'. Por si fuera poco, en la crítica de ese disco los comparaban más o menos acertadamente con Animal Collective, metiendo a ambos en el saco de lo que se ha querido llamar 'revival del shoegaze' . Sea lo que sea lo que quiera decir esa mierda.


"¡Hola! Somos los Animal Collective y creemos en el diseño participativo. Si miras de reojo la portada de nuestro CD te entran ganas de vomitar : DD"
En cualquier caso, me resulta muy gratificante escuchar discos enteros de este buen y francés señor. Principalmente porque sus dos últimos discos, esto es 'Hurry up, we're dreaming' y 'Saturdays=Youth', dotan de sentido al concepto de álbum, sin necesidad de pesados y elocuentes armatostes que hallen justificación en el típicamente claustrofóbico (y a veces temido) DISCO CONCEPTUAL (Asusta, ¿eh?).
En ese aspecto me recuerda a la capacidad de 65daysofstatic para contar una historia en cada canción, con planteamiento, nudo y desenlace. (Y sin letra, poca broma). Además, esta idea se afianza escuchando casi-cuentos como son 'Raconte-Moi une histoire', cuya única pega para mi gusto, es esa absurda voz de niño repelente narrador. Otro ejemplo de historia que merece ser contada en 'Hurry up, we're dreaming', es la que se marcan en 'Midnight city', esta vez con la colaboración de los medios audiovisuales pertinentes. Salvaje el rollete X-men y sobre todo el final del video.
Por si fuera poco, tiene más mérito todavía el ser capaz de facturar discos de más de una hora de duración sin que aburran un solo momento y en el que casi todos los cortes sean una caricia más de un lento pero apasionado acto sexual. Porque, ciertamente, 'Hurry up, we're dreaming' me hace pensar en los orgasmos de los soñadores.